El estadounidense Barry Ardolf, de 46 años de edad, ha sido sentenciado a 18 años de cárcel por acoso electrónico y suplantación de identidad de sus vecinos con fines delictivos.
Ardolf es un técnico en TI sin antecedentes criminales. Ardolf acosó a sus vecinos interviniendo su red inalámbrica, que posteriormente utilizó para conectarse a sitios de pornografía infantil, a acosarlos sexualmente y a enviar amenazas de muerte contra el vicepresidente estadounidense Joe Biden.
Para tales efectos, Ardolf creó cuentas de correo electrónico falsas y perfiles en rede sociales, a nombre de sus víctimas. Según trascendió, se trataría de una venganza de Ardolf debido a que los vecinos le habían denunciado por besar a su hijo de cuatro años de edad, escribe Wired.
Según el fallo del tribunal (documento PDF), Ardolf habría intervenido la red protegida con clave WEP mediante el software “aircrack”.
En abril de 2009, agentes del Servicio Secreto se presentaron en el trabajo de uno de los acosados, Matt Kostolnik, debido a que su identidad y dirección IP habían sido utilizados para enviar amenazas de muerte contra el vicepresidente Joe Biden.
La investigación, realizada por el FBI, reveló huellas electrónicas que les llevaron al nombre de Ardolf y a su conexión de banda ancha. Al allanar su casa, los agentes encontraron libros sobre cracking, apuntes sobre la intervención de la red de los vecinos y copias de los mensajes con amenazas que había enviado en su nombre.